lunes, 28 de enero de 2008

Ciudad de los gitanos




Los caballos negros son.
Las herraduras son negras.
Sobre las capas relucen
manchas de tinta y de cera.
Tienen, por eso no lloran,
de plomo las calaveras.
Con el alma de charol
vienen por la carretera.
¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Ciudad de dolor y almizcle,
con las torres de canela.
¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Apaga tus verdes luces
que viene la benemérita.
La ciudad libre de miedo,
multiplicaba sus puertas.
Cuarenta guardias civiles
entran a saco por ellas.
Los relojes se pararon,
y el coñac de las botellas
se disfrazó de noviembre
para no infundir sospechas.
Un vuelo de gritos largos
se levantó en las veletas.
Los sables cortan las brisas
que los cascos atropellan.
Por las calles de penumbra
huyen las gitanas viejas
con los caballos dormidos
y las orzas de monedas.
Por las calles empinadas
suben las capas siniestras,
dejando detrás fugaces
remolinos de tijeras.
¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Dejadla lejos del mar
sin peines para sus crenchas.
¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Que te busquen en mi frente.
Juego de luna y arena.
Rosa de los Camborios,
gime sentada en su puerta
con sus dos pechos cortados
puestos en una bandeja.
Pero la Guardia Civil
avanza sembrando hogueras,
donde joven y desnuda
la imaginación se quema¡
Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Que te busquen en mi frente.
Juego de luna y arena.
¡Oh ciudad de los gitanos!
La Guardia Civil se aleja
por un túnel de silencio
mientras las llamas te cercan.

¿Conocías esta canción de Marea?
Se trata de una adaptación muy fiel a un poema de un famoso escritor andaluz. ¿Quién crees que puede ser? ¿Serías capaz de averiguar el título original del poema?
¿Cuál es el tema?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Quien iba a ser sino Lorca.. y quien iba a cantar este poema sino Marea, creo que el poema habla sobre la Guerra Civil, sobre la represión que tenían los gitanos y cualquier otra comunidad para expresarse mediante su cultura, como cuando se prohibía hablar gallego, o algo así, no?



Cosas como el asesinato de Lorca, me hacen pensar porqué aún hay gente que dice ser franquista y lo que entiendo aún menos es como alguna gente de mi edad o con unos cuantos años más andan por ahí cantando el Cara al sol y levantando la mano, creo que nunca le encontraré un porqué...

Creo que el trabajo de lengua lo llevaré por ese tema... le pediré ayuda a mi abuelo que lleva como unos 5 años recopilando datos sobre la Guerra Civil en el Baixo Miño...



Ah por cierto el nombre original del poema es Romance de la Guardia Civil Española.



Bicooos =D

aguarda dijo...

Magnífico comentario Eva. Niña lista. Sigo insistiendo en que deberías presentarte al concurso de fotografía y sigo pensando que deberías escribir más... y algunas otras cosas :-)
Por cierto, ¿te gusta Lorca? Supongo que sabes que lo asesinaron en el 36, cuando estalló la guerra. Te animas a proponer algún poema de él? U otra cosa, lo que tú quieras. Es un personaje muy interesante, no crees?

Anónimo dijo...

EVA SOLO SE HA LIMITADO A PINCHAR BOTON DERECHO CORTAR Y PEGAR

aguarda dijo...

Pues haz tú lo mismo, Xoel. Criticar a los demás nunca fue tarea difícil ;-)

Lucky dijo...

Me encanta ese poema, es precioso, hace unos días ví un libro de recopilación de la obra de García Lorca y aún no sé si vaya a comprarlo, quizás al final me decida, dejo una parte de otro poema de Federico, adivinan cuál es?

Una rosa en el alto jardín que tu deseas.
Una rueda en la pura sintaxis del acero.
Desnuda la montaña de niebla impresionista.
Los grises oteando sus balaustradas últimas.

Los pintores modernos, en sus blancos estudios,
cortan la flor aséptica de la raíz cuadrada.
En las aguas del Sena un iceberg de mármol
enfría las ventanas y disipa las yedras.

El hombre pisa fuerte las calles enlosadas.
Los cristales esquivan la magia del reflejo.
El Gobierno ha cerrado las tiendas de perfume.
La máquina eterniza sus compases binarios.

Una ausencia de bosques, biombos y entrecejos
yerra por los tejados de las casas antiguas.
El aire pulimenta su prisma sobre el mar
y el horizonte sube como un gran acueducto.